domingo, 2 de enero de 2011

If




Me pongo a pensar un poco en lo que le dije a mi pequeña yo, y me pregunto si algo parecido me diría yo a mi dentro de diez años. Estoy casi segura que sí. Es sólo que, a pesar de todo, a veces todavía se me desbarata el mundo. Es como si siguiera siendo la misma niña, sabiendo que no lo soy. ¿Cuántas veces habré hecho planes que no pude cumplir? Muchas más de las que habría querido. A veces me da la impresión de no estar viviendo la vida como quería vivirla, como me dije a mi misma que sería cuando tenía 15 años. Estoy segura de que si a los quince años me hubiera escrito una carta para leerla ahora, tendría vergüenza de mi misma. Estoy segura de que si mi yo de quince años supiera lo que soy ahora, estaría decepcionada de mi. Estoy decepcionada de mi. No, no estoy diciendo que no he logrado nada. Estoy diciendo que no soy nada de lo que pensé que sería, que no soy nada de lo que sabía que sería. Algunos podrían decir que mis espectativas eran muy altas, a decir verdad en aquella época muchos me dijeron que soñaba demasiado. Y tal vez sí soñaba demasiado, tal vez todavía pido demasiado. Es sólo que yo siempre pensé ser más de lo normal... hace muy poco me di cuenta de que no lo soy. Si hoy me dijeran que escriba algo a mi futuro yo, ya no sé la verdad qué le diría. Me he dado cuenta de que las metas cambian, el problema es que a veces uno no entiende bien el límite entre un cambio de meta y un error en el camino. La línea es difusa, y es eso lo que me atormenta.

1 comentario:

Unknown dijo...

No creo que la palabra correcta sea "decepsión". Es bien sabido que "la vida es eso que ocurre mientras teníamos otros planes". Napoleón decía "ningún plan dura más allá del primer contacto entre espadas". Lo cierto es que no se puede planear tan a fondo, solo trazar lineamientos de qué es lo que queremos encontrar y llevar en el camino. Estoy seguro que la niña tu diría "que mal que sacrificaste un poco de mi para llegar a ser tu, pero decidiste lo correcto". Y tengo la certeza de que terminaría con: "cuando crezca, quiero ser como tu!", lo que es señal de que de todas las decisiones, creaste el mejor escenario.