miércoles, 21 de marzo de 2012

El pasado que me acecha desde el cajón

Hay quien dice que todo miedo se reduce una vez que se le ve de cerca. Es difícil para mi creer esto verdad cuando tantas veces han sido ya las que he lo intentado, las que he visto este miedo particular, desde adentro, desde las entrañas; y cada vez ha sido más vil su tracto digestivo.

Esta tarde, en un vano intento de ordenar el librero blanco, abrí un cajón de esos que uno no abre si no tiene ganas de encontrarse con el pasado, y fue así como me encontré a mi misma tirando mi pasado a la basura. Déjame decirte que no fue tan malo, darme cuenta de que al final una buena parte de ese pasado era ya de por sí casi pura basura. En su mayoría trabajos de la preparatoria, la guía de la UNAM de aquella vez que intenté estudiar artes visuales, un par apuntes de cuando estuve de oyente en la ENAP y cositas que robé de mis compañeros del CETI's cuando me dio por creerme cleptómana. Llegué a la conclusión de que mi miedo al fracaso y ser la vergüenza de la familia, es infinitamente menor que mi miedo a la escuela. La verdad es que no puedo negar que admitirlo publicamente me cuesta trabajo, pero me reconforta saber que nadie que me conoce lee mi blog, y los que sí lo hacen, ya lo sabían. La última vez que traté de hacerme creer a mi misma que soy capaz de terminar (o al menos comenzar) una carrera, fue cuando a mi madre le dio por pensar que tal vez me gustaría ser fotógrafa. Ella no estaba equivocada, al final yo sí. Fueron esas cosas de la Activa de fotografía las que usé para rellenar el espacio vacío que quedó cuando tiré la prepa y la ENAP a la basura, aplazando la fecha, que sé que un día llegará, de tirar también ese pasado tan lejos como me sea posible.


Favor de comentar con gentileza.

1 comentario:

Aseret dijo...

Sólo puedo decir que ser autodidacta no es malo, lástima que en este país se necesita tener un papel que acredite lo que has estudiado -meramente superficial-.

Yo dejé la carrera casi a punto de terminarla y fue una de las mejores decisiones de mi vida, gracias al apoyo de mi familia a pesar de todo lo que dijeran sobre mí.

Rodéate de gente que te enseñe y esa será tu universidad.

Salu2!!