martes, 29 de marzo de 2011

A bad dream



Soné contigo esta noche. Te soñé tal y como te recuerdo, como si fuera posible volver a verte. Recuerdo que en mi sueño tenía presente que aquello era un sueño, y aún así actué como si fuera real. Y te dije que no mil veces, cuando lo que quería era lanzarme a tus brazos y besarte como si nada nunca hubiera pasado. Durante el día me han estado pasando cosas que me recuerdan a ti. Que me recuerdan por qué me alejé y por qué quiero volver. Por qué te quiero, te extraño, no te he podido olvidar. Me gustaría poder no cumplir esa promesa en particular, y enterrarte. Dejarte ir por completo como he dejado ir a tantos. ¿Por qué será que no puedo?, que todo el tiempo, justo cuando pensé que ya te habías ido, que no volverías, algo pasa que me obliga a volver. O a querer volver por lo menos. No quiero. No quiero repetir la misma historia, no quiero volver a lastimarte, a lastimarme. Que se nos haga costumbre rompernos el corazón uno al otro como ha sido siempre. Pero si quiero. Quiero volver para probarnos que sí se puede, que podemos querernos sin herirnos, quiero volver a sentirte, a besarte, a demostrarte que sí se puede, que nada es permanente. Pero sé que no se puede. Sé que no volverás, que no volveré. Y eso me está matando.
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Fue sólo un sueño, nada más. Ya se me pasará.
Ya pasará.

1 comentario:

Unknown dijo...

La creencia popular dice "ya vas a ver cómo se va..." yo he comprobado que no se va, uno tiene que aprender a vivir con ello, que esos recuerdos, esos ecos de gritos que uno trata de ahogar y sin embargo retumban... imagenes, sonidos... todo, uno aprende a vivir con todo eso, y no es hasta que uno aprende a asimilarlo... a que es parte de lo que uno es ahora y no podría ser de otra manera... y es entonces cuando esos recuerdos pierden fuerza y no tratan de escapar, ya que están ahí contigo, y al menos, ya no tratan de atraer tu atención...